¿Sabías que podés contribuir con el medio ambiente desde tu escritorio de trabajo, simplemente moviendo el mouse? ¡Enterate acá cómo hacerlo!
Con un mundo cada vez más virtual debido a la pandemia, la vida en general se volcó a las nuevas tecnologías. El uso de datos y el almacenamiento en la nube tienen un rol protagónico en la rutina diaria de las personas, generando sin dudas una diversidad de beneficios y practicidad.
A pesar de que, en general, la virtualidad ayuda en muchos aspectos a disminuir la explotación ambiental (como la reducción de uso de papel, evitando la tala desmedida de árboles), algunas costumbres que llevamos a cabo en ese plano sin darnos cuenta, pueden generar un impacto negativo en el medio ambiente. La huella ecológica del creciente tráfico digital equivale a un consumo aproximado del 7% de la electricidad mundial, según un informe de Greenpeace.
Te mostramos una serie de acciones simples que podemos implementar desde nuestro lugar para ayudar a que la experiencia digital no cause tanto daño al planeta. Además, ¡nos ayudan a mantener el orden en nuestro trabajo!
1 . Limitar el almacenamiento online: guardar documentos en la nube consume el doble de energía que cuando los guardamos directamente en la computadora. Si no tenés suficiente espacio en la PC, una buena opción es adquirir un disco externo.
2 . Reducir el contenido compartido: cada cosa que subimos a las redes sociales como Instagram, Twitter, Facebook, WhatsApp, Youtube o Tik Tok potencia la contaminación digital. Seleccionemos lo importante y significativo antes de compartir todo.
3 . Eliminar la ‘basura digital’: borrar con regularidad mails, fotos viejas, elementos de caché, chats antiguos, apps que no uses, es una buena idea. Todas esas cosas pueden ir fácilmente al tacho de basura. Incluso podés hacerlo automáticamente, buscando alguna app que te sirva para ese fin.
4 . Anular la suscripción a newsletters innecesarios: la contaminación generada por los correos no deseados puede ser muy perjudicial para el medioambiente. Te recomendamos eliminar de tu casilla suscripciones, boletines, fuentes de spam y otros aspectos virtuales, así como también evitar enviar este tipo de contenidos. Todos estos datos almacenados en la nube podrían, según el informe de Greenpeace, aumentar la demanda de carbón y otros combustibles fósiles.
5 . Evitar responder o reenviar largas cadenas de e-mails: es mucho más sano para el medio ambiente que lo trates en una conversación. Además es súper incómodo comunicarse a través de correos electrónicos extensos, donde la información importante puede perderse.
¿List@ para colaborar con el planeta desde la PC o el celular?